Como actividad final del Proyecto decidimos hacer la actividad
"El fantasma Come-miedos"; que apareció un día en clase por sorpresa. Todos los peques se preguntaban que hacía allí y yo les conte que a ese fantasma le gustaba comerse los miedos de los niños. ¿Cómo se los come? primero pensaron en qué cosas le daban miedo y luego lo dijeron en voz alta uno por uno a todos sus compañeros y luego hicieron un dibujo en la mitad de una cuartilla de color y se la regalaron al fantasma para que se los comiera,... descubrieron entonces que después de ragalar sus miedos se sentían mejor y ya no se asustaban tanto.
Como segunda parte del fantasma: lo disfrazamos. A la siguiente semana quitamos todos los miedos que le pusimos y decidimos decorarlo con huellas de colores, lo pasamos superbien y nuestro fantasma quedó muy colorido.
Y llegó el momento más esperado, la entrega de nuestro diploma de
CHICO/A SUPERVALIENTE.
Ahora nos reímos del miedo.
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